El Carente


 

 

En mi lejana infancia tuve,

un cariño amado que el viento del sur se llevó,

como el sol al atardecer.

  

Pero al cielo se mudó,

como la columna de humo en su paso;

idea que a mí me consuela,

aunque la neumonía le sepultó.

 

Envidio a otros que lo gozan.

Aquel cariño amado que busco,

tesoro que muchos no estiman,

y lo exponen, como joyas de feria a troleros.

 

Y si hoy de nuevo le tuviera,

le escondería de ladrones y de bandidos.  

 

Bien sé, que un cariño amado tuve,

recuerdo vivo que conozco,

recuerdo vivo que no se apaga,

recuerdo vivo de mi alma.

 

Matías Elé Nzang

Bata, 16/06/2020


Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

POR LOS CAÍDOS

África

Mis Cumpleaños